Nutrición capilar, ¿la necesitas?
tener pelo hermoso y bien tratado es el deseo de cualquier Mujer, para ello es importante invertir en algunos tratamientos esenciales como la nutrición capilar que garantice unas hebras protegidas y llenas de vida.
¿Qué es la nutrición del cabello?
La nutrición capilar no es más que la reposición de nutrientes en el cabello que se pierden por diversos factores como el uso de secadores y planchas, playas, sol, químicos, agua caliente, entre otros.
Los nutrientes que se reponen en el cabello durante la nutrición son aceites y lípidos naturales del cuero cabelludo que se pierden y tienen la función de proteger el cabello creando una película protectora alrededor de las cutículas. Esta película protectora mantiene la hidratación por más tiempo, evitando los diversos problemas que nos aquejan... mechones quebradizos, desnutridos, porosos, encrespados, puntas abiertas, enredos y falta de brillo.
¿Cuáles son los beneficios de la nutrición del cabello?
1) Hidratación prolongada:
La nutrición capilar crea una barrera alrededor de las hebras capilares, evitando así que se pierda el agua natural del cabello.
2) Control de volumen y frizz:
El cabello queda más alineado, con menos volumen y evitando el encrespamiento.
3) Cabello suave y brillante:
Con una hidratación reforzada, el cabello se vuelve más sedoso, más fácil de desenredar, disciplinado y refleja mejor la luz, aportando así un aspecto sano y brillante.
4) Previene las puntas abiertas:
La nutrición repone los lípidos del cabello, estos lípidos son ricos en ácidos grasos que son fuentes de antioxidantes que protegen el cabello del debilitamiento y previenen las puntas abiertas.
Cómo proporcionar una buena nutrición al cabello (paso a paso)
1 – Para empezar debes lavar tu cabello con champú centrándote en las raíces, masajear el cuero cabelludo con las yemas de los dedos y luego enjuagar.
El Champú más recomendado es el que tiene una fórmula limpiadora y nutritiva, que elimina las impurezas sin dañar los aceites naturales del cabello. Debe ajustarse a tu tipo de cabello.
2 – Con una toalla limpia, retira el exceso de agua de tu cabello.
3 – Separa el cabello en cuatro secciones, dos arriba y dos abajo.
4 – Aplicar la mascarilla nutritiva mechón a mechón desde el largo hasta las puntas, evitando siempre la raíz. Elige una mascarilla rica en aceites.
5 – Dejar actuar el producto según el tiempo indicado en el envase, el tiempo varía de 3 a 10 minutos.
6 – Retirar la mascarilla nutritiva y terminar aplicando el acondicionador ligero, que también es muy importante porque cierra las cutículas abiertas por el Champú, ayudando a que los nutrientes de la mascarilla penetren mejor en el cabello.
Aplicar en largos y puntas y enjuagar, asegurará más brillo.
La frecuencia de este tratamiento capilar Dependerá de las necesidades de cada cabello, pudiendo realizarse cada 15 días o mensualmente.